¡El tiempo! ¿Qué es el tiempo? ¿Dónde vive? Se trata, seguramente, de un viejecito encorvado que camina cabizbajo, abriendo trocha. Unas veces trae novedades felices, otras no tan felices y hay ocasiones en que simplemente pasa de largo contando una vuelta y otra, dejando caer los calendarios.
Hace algunos años ensayé una definición. El tiempo es agua que se escurre entre los dedos. Imposible detenerlo, su marcha es inexorable, no se sabe de dónde viene ni a dónde va.
Se arrastra debajo de las hojas secas y está ataviado con el polvo del viento, la humedad de las lluvias de la tarde, la caricia de las garúas y la escarcha del rocío en los amaneceres. No lo vemos, sabemos que existe, pero nunca se deja ver. Existe en el lerdo caminar de los hombres y mujeres trajinados por los esfuerzos y el llanto y la sonrisa de los niños al nacer encendiendo la esperanza.
Llegar a 2 años, para unos es gran esfuerzo, para otros un motivo de admiración y hay quienes esbozan una sonrisa por los logros, pero para quienes protagonizan un emprendimiento, es un enorme sacrificio.
Sostener en el aire una publicación en una ciudad que se despereza de la tradición de leer en papel, de acariciar las letras de las publicaciones, es muy difícil. Hojear, rehojear y cerrar el periódico produce la satisfacción de haberlo revisado todo.
“Peruanísima” en la línea del tiempo
“Peruanísima” la revista digital impulsada por Carlos Casas Suárez en Junio del 2023, explora un formato inusual en un medio todavía nuevo que no se palpa, pero que se ve. Corre por las carreteras de la información, esperando que sus mensajes sean de utilidad y de entretenimiento.
El Internet, apenas tiene un poco más de 2 décadas y todavía tarda en imponer su ofrecimiento tecnológico. Con las limitaciones del medio, “Peruanísima” ha llegado a los dos años. Pocas familias a la fecha tienen un ordenador en su casa, aunque casi el 90 por ciento de la ciudadanía andante cuenta con un celular que contiene a “Peruanísima”, pero que tiene temores de utilizarlo para la lectura. Pese a todo eso, la lectoría ha crecido en estos dos almanaques.
El problema es que las publicaciones en cualquier época no tienen otro sustento más que la publicidad y ésta escasea en este caso. La lectoría crece pero el avisaje todavía está en el arranque. Los anunciantes no entienden aún que los medios digitales están avasallando en la preferencia de las audiencias, sin embargo, muchos piensan que el avisaje y la promoción de los productos son gratuitos. Aún les cuesta invertir en el branding de sus marcas.
A este momento es un acto de heroicidad sostener por dos años continuos “Peruanísima” en las carreteras de la información, sin embargo, Carlos Casas el promotor, director y animador de esta empresa, sigue navegando por aguas todavía bravas.
¿En qué se paree “Peruanísima” a la primera publicación de papel?
La primera publicación que se tenga memoria aparecida en Abancay, fue “El Rejistro Oficial” -Rejistro con “j”- hace 138 años, idea del prefecto de entonces Felipe Díaz, coronel del ejército, para informar las actividades oficiales de las dependencias del estado. También incluía actividades sociales que era el atractivo para la sociedad abanquina de entonces. Duró 25 años, Guillermo Viladegut Ferrufino en “Alma y Rostro de Abancay” no precisa si la publicación fue un semanario o un diario. Se editó en imprenta con tipos movibles letra por letra, un acto realmente laborioso.
Luego aparecerían otros semanarios: “El Yunque”, “El Vulcano”, “El Campeón”, “El Apurímac”, “El Trabajo”, “El Esfuerzo”. “La Patria” el primer diario independiente aparecería en 1938 bajo la dirección del Prof. Manuel Manrique. En 1941, asumiría la dirección Guillermo Viladegut hasta 1958 en que cerraría para siempre.
En 1944, se organizó una feria exposición con todos los periódicos aparecidos en Abancay por medio siglo. El promotor fue el Ing. Guillermo Arévalo. Se exhibió 75 periódicos de diversos formatos y tamaños, cada cual con nombres muy sugestivos.
El Meridiano fue lanzado en 1970 por Gonzalo Sotelo en su propia imprenta. Fue un semanario que se mantuvo por espacio de una década
Luego aparecería en esa década “El Líder” diario dirigido por Guido Guzmán Ballón a mimeógrafo en papel bulky doble oficio que sólo tuvo poco más de dos meses y que no pudo sostenerse por inviabilidad financiera.
Le seguiría “El Chasqui” impulsado por Luis Quintanilla López apareció con grandes sacrificios, aún a pérdida, se editó en imprenta luego el sacrificio continuó y logró comprar una máquina Offsett que es con la que se edita hasta ahora por más de 30 años seguidos.
“Pregón” es un diario abanquino dirigido por Roger Contreras Carrión desde hace 15 años. Fundado por Mauro Contreras Mena quien compró una imprenta para luego adquirir con todos sus ahorros una imprenta offset que es con la que se edita hasta ahora.
Cada número de estos dos diarios es un enorme sacrificio de trabajo y de financiación. Los dos periódicos se sostienen con las ventas de sus tirajes a un costo de 1 sol por 24 páginas tamaño tabloide.
Hacia 1977 Aparecería en el éter “Radio Abancay” promovida por el Concejo Provincial de Abancay. Toda una novedad. El Dr. Julio Sotelo apunta que el transmisor inicialmente de onda Corta fue adquirido en Arequipa, luego fue reconvertido a Onda Media con válvulas 4-400. El alcalde en el inicio del año fue Guillermo Viladegut y le siguió Agustín Sueldo Guevara promotores de esta empresa municipal. La emisora se consolidaría con Melitón Casaverde Río quien fue alcalde en 1958.
¿De qué vivían los periódicos y la novedosa emisora?
Los periódicos de la venta de sus ejemplares que solo alcanzaba para cubrir los costos de producción y la emisora municipal de los saludos musicales por cumpleaños. La publicidad siempre fue escasa.
Lastimosamente para el caso, el golpe de estado producido luego de las elecciones de 1962 encabezado por el Gral. Ricardo Pérez Godoy truncó varias cosas. Cerró por ejemplo la emisora municipal “Radio Abancay” para evitar las críticas y controlar todo intento de protesta o rebelión.
Abancay no tenía ni periódicos ni emisora de radio, en 1962 el golpe militar cerró toda posibilidad de libre expresión. La Junta Militar dictatorial evitaba a través de las prefecturas la rechifla y el reclamo. Las alcaldías se cubrían por designación vertical. No había elecciones, de modo que fue una orden fácil de ejecutar. El alcalde de entonces cerró la única radioemisora “por falta de repuestos”. Fue una orden que se cumplió sin dudas ni murmuraciones.
Julio Cesar Casas un Quijote sin mancha.
En 1968 Julio Casas Casas, un abanquino que, juntando todos sus ahorros, con ayuda de su esposa Isabel había comprado proyectores de películas e iniciado el cine “Santiago” en Cusco, cerró su sala para trasladar la empresa a Abancay.
No había tomado en cuenta que la central hidroeléctrica de Matará tenía una potencia débil y en tiempos de lluvia se cortaba el fluido eléctrico a veces por varios días ¿Cómo iba a prosperar un cinema en esas condiciones?.
De modo que, vivir en Abancay sin comunicación audiofónica, sin diversión cinemera y sin periódicos significaba vivir para trabajar y trabajar para alimentarse. ¡Un golpe a la conciencia!
Abancay: Regresión del futuro.
Cuando llegamos al 2023 nos seguimos encontrando con idealistas quiméricos. Uno de ellos es Carlos Casas Suárez, embarcado en la aventura de hacer “Pêruanísima” un magazín para medios electrónicos.
“No se gana, pero se goza” dirá Carlos con el tiempo, porque para que eche a caminar el branding y el marketing en Abancay, necesitará de un tiempo más. Mientras tanto lo veremos seguir corriendo como Filípides por el valle de Maratón proclamando a los cuatro vientos que Grecia ha ganado la batalla.
Carlos Antonio Casas Suárez es el corredor cruzando las brumas del tiempo. ¡Arriba el ánimo compañero, no estás solo! También estamos nosotros para acompañarte en el intento.
¡Feliz 2do aniversario!
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