DELETREANDO UN RECUERDO ABANQUINO DE MES PATRIO: LAQASQA

por Tany Pinto Sotelo
101 vistas 3 min.
A+A-
Reinicio

No puedo sustraerme a la exhortación de Óscar Loayza Azurin a propósito de retro-traer costumbres ciudadanas de Abancay para cuando llegara JULIUS, mes peruano, emperador supremo de Ayllus y Andes; costeras arenas, amazonias sin prisa, cargado de algarabía patriótica y responsabilidad colectiva: presentar el pueblo remozado, limpio, brillante, embanderado de bicolor rojo/grana de sus héroes, níveo/blanco de sus andes. Lindo mi pueblo !
Y, entonces, ceñida de añoranza y memoria con fotografía de gratitud, empiezo a deletrear un recuerdo de niñez y adolescencia, de juventud madura y de adultez preñada de esperanza para ver, con lente ausente y lejanía que duele, alguna posibilidad de reencuentro con aquel aire limpio, bello, espontáneo, natural, responsable de mil voluntades comunes de pueblo y autoridad, que, en hilo de amor y fe, patriotismo y disciplina ciudadana, transitaba un solo pensamiento de amabilidad, devoción al Perú en su fiesta de cumpleaños: ponerse traje festivo para entonar a modo Estentor:
” SOMOS LIBRES”
Todavía nuestras empinadas calles, ahora carcomidas de asfalto y hollín que piden a gritos cemento en remiendo, carro basurero, se regocijaba con trajinar de zapatos, botines y ojotas, por calzadas bien lustradas para el desfile 28.
Nuestras casas, casi todas, de adobes en luz de blancas paredes y techos teja bermejo, se vestían de gala de comienzo a fin, bañadas – las más pobres – en cal y yeso, ladrillo reciclado pulverizado en batán; faena de hogares completos en colectiva tarea de albañiles de brocha gorda, con denominación común :
LAQASQA (Verbo quechua Laqar: embadurnar)
Probablemente – no recuerdo – que hubieran comercios de pintura enlozada de marcas Pato o Gallareta, Vencedor o Vencido; tampoco suficiente dinero para adquirirlas encargando a Lima o Cusco.
Se trataba de preparar en casa un enlucido orgánico doméstico inmemorial, con apenas dos soles de cal o yeso, agua de pilón de esquina, gel /aloe barato de Gigantón o San Pedro ( Variedad de Cactus familia Echinopsis Pachanoi) que, sin costo alguno, te regalaban las riberas del Olivo, Chinchichaca o Pachachaca.
Limpiadas las espinas púas de las siete costillas del cactus, trituraban la planta para extraer la espumosa baba
la que, mezclada con agua y cal o yeso a modo de una emulsión pintura, servía para ” laqar ” paredes externas de las casas de adobe con gran brocha gorda fabricada de lana de oveja amarrada a un duro palo corto. A su vez, el zócalo de pared marcado en cordel, recibía la misma mano de pintura en color rosa/palo o pálido naranja – tinte de ladrillo molido –
Final: Esplendor de sol abanquino!
No les digo ya, la emoción cuando el
embanderamiento general; por purito sentimiento de amor a la patria, emblemas en rojo y blanco, grandes, pequeñas, de seda, paño o percal, con asta o pica de caña brava o carrizo, madera pulida- según economía- proclamaban cumpleaños del Perú: Patria, país, estado, nación, Madre desde Tamburco a Patibamba y desde Aymas Villa Gloria hasta el Olivo y más allá.
Ha comenzado Julio patrio y, tengo pena en el alma; ya no hay LAQASQA ni embanderamiento; compramos pintura de marcas finas, emblemas que venden a un sol o mil, telas finas y baratas, pero nadie hace caso; nos sentamos sobre ordenanzas que al final ni se cumplen ni sancionan, o, ponemos a fuerza una Peruanisima Bicolor sucia y empolvada de tiempo y olvido, muchas veces hecha flecos.
Cantamos Somos Libres sin presentir su profundo simbolismo, incluso a sabiendas de, perder goles que alardeamos pretensiosos de fútbol macho.
A pesar de todo:
“Tengo el orgullo de ser peruana (…) de haber nacido en esta hermosa tierra del sol (…)
intinpa
Arequipa 3 julio 24

Deja un comentario

También le puede interesar

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Suponemos que está de acuerdo, pero puede darse de baja si lo desea. Aceptar Seguir leyendo

error: ¡Lo sentimos, este contenido está protegido!